(Re)visión cultural
Un escueto comunicado emitido el pasado 19 de enero por la Secretaría de Cultura, anunció que el actual presidente, Salvador Sánchez Cerén, aprobó junto al Consejo de Ministros el decreto para la creación del Ministerio de Cultura, que entrará en vigencia 90 días después de publicado en el Diario Oficial. La noticia pasó sin pena ni gloria en el complejo entramado noticioso nacional. Tampoco causó ninguna reacción de júbilo o interés entre los mismos artistas y trabajadores de cultura. El motivo de dicho desinterés puede ser la fuerte sospecha de que la creación del Ministerio no significará más que un cambio de nombre a la actual dependencia y que las políticas del gobierno en referencia al área cultural continuarán siendo las mismas. Esto es otro reflejo de las decepciones que como ciudadanía tenemos con varios aspectos de la actual administración. Una serie de ambiciosas promesas fueron planteadas por el FMLN como parte de la campaña presidencial, promesas que se trabajaron y discutieron entre artistas y gestores culturales, entusiasmando a muchos de nosotros con la idea …