Month: August 2019

Cuerpo de polluelo de albatros, lleno de plástico. Foto de Chris Jordan.

Lluvia plástica

A mediados de este mes de agosto, la revista Science Advances publicó un estudio que demuestra que la contaminación por plástico está presente no sólo en el fondo de los mares sino también en los lugares más remotos e inhabitados del planeta. Entre los años 2015 a 2017, un grupo de investigadores tomó muestras de nieve en tres lugares diferentes de Alemania, en los Alpes suizos y en el Ártico que, tras ser analizadas, mostraron presencia de microplásticos. Debido a su tamaño y ligereza, dichas partículas pueden moverse con facilidad en la atmósfera e incluso viajar y llegar a lugares con escasa presencia humana, como el Ártico. Los tipos de plástico encontrados en las muestras tenían diferentes orígenes y provienen de objetos como pintura, llantas, mangueras, empaques de hule y otros de uso industrial. Por su parte, el Servicio Geológico de los Estados Unidos analizó también de forma reciente, muestras de agua de lluvia recolectadas en las Montañas Rocosas del estado de Colorado. Detectaron que el 90 % de las muestras tomadas tenía presencia de …

Los hermanos Romero

Una noche de enero se escucharon en la colonia maullidos de gato chiquito. Eran tan fuertes y afligidos que varios vecinos salimos a ver qué pasaba. Una gata callejera, que vive en el techo de unas casitas que están a la entrada de la colonia, había vuelto a parir. De alguna manera, uno de sus críos había llegado al pasaje. Estaba escondido entre unas macetas, en la acera de mi casa, maullando a todo pulmón. Su piel era atigrada en gris, con el pecho blanco. Tendría un par de meses de nacido. Tres o cuatro vecinos nos apiadamos. Alguien asumió que era hembra. “Pobrecita la gatita”, dijimos todos. Un par de personas le pusieron comida. Intentamos agarrarla, pero huía muerta de miedo. En los días siguientes, la gatita siguió maullando. De pronto aparecía la madre a darle teta. También aparecía el padre, un gato grande, blanco y con parches grises. Los tres se juntaban en las noches a jugar en mi parqueo. Poco a poco, la gente dejó de poner comida. Poco a poco, sus …