Year: 2024

Releer

Uno de los escritores que más admiro es Vladimir Nabokov. Nacido en la Rusia imperial, en 1899, escribió y publicó sus primeras nueve novelas en ruso. Debido a diversas circunstancias personales, Nabokov vivió en varias ciudades europeas. Estudió en la Universidad de Cambridge donde terminó de profundizar su conocimiento del inglés, idioma que ya había aprendido en su tierra natal. Llegó a dominarlo de tal manera que escribió sus futuros libros en ese idioma. Su novela más conocida, Lolita, publicada en 1955, es sin duda una de las obras donde la belleza del lenguaje tiene un rol estelar. 

Nuestra auténtica riqueza

Hace unos días fuimos a cenar pupusas con un grupo de amigos. Uno de ellos vive en San Francisco y vino de visita, por lo que hicimos la salida obligatoria de la comida típica. Decidimos ir a un lugar en Antiguo Cuscatlán, cuyo principal atractivo eran las pupusas hechas en el tradicional comal de barro. Una vez instalados en el negocio, descubrimos que había cambiado muchísimo. De hecho, ya no tiene el mismo nombre (suponemos que cambió de dueño). El local había sido renovado. Ya no tenía su decoración de mesas y sillas rústicas en madera. Un jardín precioso que tenían hacia el fondo, fue sustituido por una nueva cocina y un área para incluir más sillas y mesas. Las pupuseras, que antes estaban a la entrada, están en el fondo y ahora utilizan planchas metálicas.

Kafka

Cualquiera que pase una noche teniendo sueños agitados, despertando a cada rato y sufriendo un dormir ligero (donde no se sabe si se está dormido o si los sueños son una continuidad del monólogo interno), se levantará a la mañana siguiente con la sensación de ser un insecto, arrastrándose con torpeza por el día, con el cuerpo pesado y con la lucidez anulada debido a la falta de descanso. Quizás La metamorfosis, novela del escritor checo Franz Kafka, nació de una situación similar. La figura del insecto es, entonces, una metáfora del peso de la vida y del absurdo en que se transforma la existencia, cuando lo único que se hace es repetir un patrón cotidiano que drena y anula la vitalidad interior.

Memoria y ripio

Desde 1992, cuando el país buscaba cómo reconstruirse después del trauma de la guerra, se convirtió en una constante por parte de numerosos artistas, escritores, académicos e investigadores, insistir ante las autoridades sobre la importancia de la inversión en cultura. El tema no era un capricho. La cultura es siempre uno de los primeros aspectos a destruir cuando ocurren conflictos bélicos, sean internos o externos, porque al hacerlo se ataca algo vital para debilitar al enemigo de turno: su identidad y su orgullo nacional. Insistir en la inversión en cultura en un país como El Salvador se hacía desde la esperanza que significó la firma de los Acuerdos de Paz, desde la idea de una nueva oportunidad para reordenar el estado de cosas de nuestro siempre atribulado país. La cultura podía ser una herramienta de acompañamiento imprescindible para la reconstrucción, sobre todo de nuestra estructura social y comunitaria. Una herramienta que podría servir para el reencuentro de nuestra gente a partir de la identificación de lo que nos une como nación y de lo que …

Obras maestras

De un tiempo para acá, me han sorprendido las afirmaciones de personas que en redes sociales califican de “obras maestras” a muchos estrenos de películas, series, libros o discos. Cualquiera pensaría que estamos viviendo una nueva época de oro y que la humanidad está creando gran cantidad de productos insuperables, de gran valor artístico. La vehemencia con la que se hacen estas afirmaciones es tal que, cuando alguien manifiesta no estar de acuerdo, la persona es de inmediato tildada de estúpida o ignorante. Es decir, no hay derecho a tener un gusto diferente, ni siquiera cuando se argumentan los motivos por los cuales un producto no solamente no es de nuestro gusto, sino que está lejos de poder ser considerada una obra maestra.

La ciudad y el olvido

 Uno de los libros cuya lectura más me ha impresionado es Estambul, ciudad y recuerdos del escritor turco Orhan Pamuk, ganador del Premio Nobel de Literatura en 2006. El libro es un relato sobre su infancia y adolescencia, pero también una memoria cultural sobre su relación con la ciudad de Estambul. Una relación de amor, sin duda, pero también de bastante amargura, según señala el mismo autor. Pamuk recrea diferentes aspectos de su vida personal y familiar, a la vez que nos describe la visión que tuvieron de la ciudad diversos personajes ilustres como Gustave Flaubert, Gerard de Nerval, Antoine Ignace Melling y diversos escritores turcos. Estambul es un personaje de esta narración, donde se habla de las transformaciones que han sufrido diferentes barrios, calles y edificios a lo largo de su historia y en los recuerdos de Pamuk.

Una discusión pendiente

El pasado 17 de enero, la escritora japonesa Rie Kudan ganó el premio Akutagawa, el más prestigioso galardón literario de Japón. El premio se otorga dos veces al año (en enero y en julio), y busca promocionar a nuevos autores japoneses. La novela ganadora se llama Tokyo To Dojo To (La torre de la compasión de Tokio, en traducción literal). Cuando Rie Kudan dio sus primeras declaraciones en la sede de la editorial Shinchosha, admitió que para escribir el libro se había auxiliado de ChatGPT, el servicio de inteligencia artificial disponible en internet. Según Kudan, la utilización de la IA fue mínima, “sólo una página” de las 144 que consta la novela.

Para cuando me vaya

El 14 de febrero pasado murió una querida amiga. Tuvimos una amistad cercana y larga. Ocurrió en otro país, donde vivimos el breve sueño de una utopía hecha realidad. Ocurrió en otro tiempo, cuando el filo de la muerte nos hacía amar la vida con furor y asombro. Ocurrió en esa edad en que nos sentimos inmortales, cuando la juventud te colma de belleza y el futuro es un tiempo que puede esperar.

Una curiosidad editorial

¿Están entusiasmados con el lanzamiento de En agosto nos vemos, la novela inédita de Gabriel García Márquez? La verdad es que yo no. Resulta obvio que cuando muere un escritor famoso, hay muchas personas que ansían encontrar entre los papeles del fallecido, una obra inédita, correspondencia, fotografías, ensayos o cualquier material que pueda publicarse para aprovechar la ola del duelo colectivo. El factor emocional suele ser un elemento explotado por el mercado para promover un producto que genere ventas y ganancias abundantes. Pensemos, por ejemplo, en los llamados “productos nostálgicos”. Los migrantes buscan en sus países de destino los alimentos que consumían en su país de origen, no sólo para replicar sus comidas y tradiciones, sino para recordar, a través de sabores y texturas, el añorado terruño.

Amistades perdidas

Hace poco tuve oportunidad de ver la película The Banshees of Inisherin (2022) del director Martin McDonagh. En Hispanoamérica la titularon como Los espíritus de la isla. Fue nominada a diferentes premios cinematográficos, ganando varios de ellos. Está protagonizada por Colin Farrell y Brendan Gleeson, quienes ya habían trabajado en el 2008, junto con McDonagh, en la comedia negra En Brujas (In Bruges). La historia de The Banshees… transcurre en una isla irlandesa, donde dos amigos de toda la vida, Pádraic y Colm, terminan su amistad. Esto ocurre de manera impuesta, ya que es Colm el que, de un día para otro y sin darle explicación alguna a Pádraic, decide que ya no quiere hablar con él. Tenían por costumbre tomarse unas cervezas después de los oficios del día. La comunidad entera sabe de su amistad y están tan extrañados, como el mismo Pádraic, por aquel distanciamiento.

Un año de buen cine

Escribo esta columna al día siguiente de anunciadas las nominaciones a los Premios Óscar, premio anual concedido por la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas a lo que sus miembros votan como lo mejor del cine. Como cada año, después de dicho anuncio, el público discute sobre las ausencias y las personas o películas que, según muchos, debieron recibir una nominación. Mientras van y vienen nombres y argumentos, pienso que se pierde de vista el estado general del cine que conocimos el año pasado que, en mi opinión, aportó muchísimas producciones de gran calidad. Me arriesgo a decir que el 2023 fue un año de buen cine.

El valor de un libro

Cada vez que leo o me hacen la pregunta de cuál es el libro que salvaría de mi biblioteca personal en caso de un incendio, pienso en el mismo: la Antología de poesía surrealista francesa publicada por Ediciones Coma, de México, en 1981.  La compilación fue hecha por Julio Ulloa e incluye traducciones de Aldo Pellegrini, César Moro y Emilio A. Westphalen, entre otros. Hay una nota biográfica de los más de 50 autores incluidos y varios poemas de cada escritor. André Breton, Louis Aragón, Paul Eluard, Leonora Carrington, Benjamin Péret, Antonin Artaud, Tristán Tzara, René Char, Aimé Césaire, Jacques Prevert y Robert Desnos son algunos de los autores incluidos.