¿Cree que si su madre no hubiera sido asesinada nunca se hubiera convertido en escritor?
Es una buena pregunta, pero pensar eso resulta bastante patético. Nunca pienso en estos términos porque sé que no puedo volver atrás en mi vida y cambiar a mis padres. Por tanto, no pierdo mi energía en darle vueltas a este tema. Eso es lo que sucedió.
¿Continúa todavía la maldición de su madre?
No. Escribí el libro, me enfrenté a esa maldición y ya no estoy en ese círculo. Ahora soy un hombre feliz.
Su libro me recuerda a Mujeres, de Charles Bukowski. ¿Lo pensó mientras escribía?
A mí no me gusta Bukowski. Y no he leído el libro Mujeres. Por tanto no puedo relacionarlos… Pero, seguro que se comporta mal con ellas, ¿no?
De usted se ha dicho que es un depredador, un machista y un fascista. ¿Está de acuerdo?
“La maldición de mi madre ya está conjurada. Soy un hombre feliz. Yo no tengo una tendencia política muy definida. Tampoco pienso que los hombres sean superiores a las mujeres. Y en cuanto a lo de depredador, sí. Yo mismo lo digo en el libro. Pero para mí es una forma de decir que trabajo para el amor. Soy un depredador en busca del amor.
Usted es un bestseller de novela negra. ¿Por qué cree que triunfa (la novela negra)?
Porque le da a los lectores una amplia visión de la sociedad a la vez que es una historia entretenida. La conjunción de ambas hace que todo arda.
Published on March 8, 2011